EL ENCUENTRO
El día que Malcolm y Angus conocieron a Bon éste estaba realmente cabreado, pues se había puesto por error las bragas de su mujer. Eso es un buen comienzo, ¿verdad? El que quiera saber cuándo y dónde nació, de quién era hijo, en qué grupos tocó y demás datos biográficos, que se vaya a la wiki, porque yo me los voy a saltar. Creo que será más productivo pasar al grano.
Bon Scott se cruzó en el camino de AC/DC cuando se convirtió en el chófer de la banda, esto es: conducía la tartana de furgoneta en la que se desplazaban Young&CIA, y por lo visto iba a toda mecha. Y al descubrir la música y la fuerza de AC/DC en directo vio una gran oportunidad para rememorar sus días tocando en una banda. Bon había pertenecido a varias, pero diversos reveses (lo normal en cualquier banda) sumados a un grave accidente de moto que casi le manda al otro barrio, le llevaron a ganarse la vida con estos trabajos menores. Por tanto decidió intentar ganarse un puesto en AC/DC. Como batería.
Bon Scott tenía corazón de batería. Se piensa erróneamente que de niño tocaba la gaita en una banda de gaiteros. Pero en esa banda (Fremantale Scots Pipe Band) lo que él tocaba era el tambor, y de hecho fue el tamborilero principal durante un par de años. En su primer grupo “The Spektors” cantaba, pero en las actuaciones alternaba la voz con su gran pasión. Así que él se ofrecía a los Young como batería. “Pero Bon… Ya tenemos batería.” contestaban.
Fue George Young (el hermanísimo), quien conocía a Scott desde su época de los Easybeats el que vio en él un posible cantante, pues la banda no estaba muy a gusto con Dave Evans (primer cantante de AC/DC). Por otra parte, Bon admiraba a George. La decisión estaba tomada.
“La noche en la que Bon debutó con nosotros se presentó con dos botellas de bourbon, coca y speed. Se lo metió todo en media hora, y cuando creíamos que se iba a caer desplomado se levantó y dijo: Bien, ya estoy listo!” según palabras de Angus. Bon salió entonces al escenario solo. Entre el público había muchos seguidores de Evans que esperaban ver a su ídolo. Bon agarró el micro y dijo “El que haya venido a ver a Dave Evans cantar con AC/DC no va a verlo esta noche porque el grupo lo ha echado porque se ha casado”.
Los Young se llevaron las manos a la cabeza, pero acto seguido Bon tomó el control. Empezó el concierto y la banda inmediatamente sintió una química que no había sentido antes.
AC/DC era pura dinamita, pero se puede decir que fue Bon Scott el que encendió la mecha. Con él, la banda encontró su verdadera personalidad. Empezaron a abandonar la estética glam y aparecieron los vaqueros y los tatuajes. Bon era pura testosterona. Y además era un imán para las mujeres (al principio se asociaba AC/DC con el rollo gay, debido a la deformación “acca dacca”). Existe incluso la leyenda de maridos que pedían al “Dragón Tatuado” que complaciera sexualmente a sus mujeres.
LAS CANCIONES
Bon comenzó a componer unas letras que fueron bautizadas como “poesía de lavabo”. Llevaba siempre consigo una libreta en la que apuntaba ideas, como la frase “A long way to the top if you wanna Rock and Roll”, que sólo era una frase, pero George sabía “picarle” para que sacara una letra entera. En cuanto a la gaita en esta canción: sí, la toca él. Pero porque tenía gran facilidad para aprender. George se lo propuso también creyendo que había tocado la gaita de niño, y Bon la sacó sonido rápido sin apenas haberla tocado en su vida.
She’s Got Balls está inspirada en su ex-mujer (la causa de la ruptura fue el ingreso de su marido en AC/DC) . Según Bon, no es que ella tuviera “un par”, es que el par que tenía era el suyo. En las manos, claro.
She’s Got The Jack (ella tiene purgaciones/gonorrea) se refiere a las continuas afecciones venéreas que contraían todos (salvo Angus, que no ligaba), pero Bon se llevaba la palma hasta el punto de que en la clínica, todos los empleados le conocían hasta el punto de llamarle por su nombre.
Y en cuanto Whole Lotta Rosie ya sabéis: en un concierto en Tasmania por allí andaba aquella pedazo de pelirroja. Según palabras de Bon: “¡Era realmente enorme!¡Cómo iba a decirle que no!”
Cada letra era relativa una vivencia. Y si queréis saber quién era Bon Scott, os sugiero que escuchéis detenidamente Rock&Roll Singer del High Voltage.
EL PERSONAJE
Lo que hizo grande a Bon Scott aparte de su etílica voz fue su personalidad. Era un cantante de Rock, no una estrella. Tenía ese punto gamberro suficiente para salir vestido de colegiala en la televisión australiana cantando Baby Please Don’t Go. Nunca buscaba pelea, pero si era otro el que le provocaba no dudaba en lanzarse. Se perdía en las giras durante el trayecto de una ciudad a otra pero nunca llegó tarde a un concierto. No dudaba en complacer a cualquier mujer (no se limitaba a modelos, como otros). Y sobre todo era un tipo legal y amigo de todo el mundo. Bon entraba en un bar y lo primero que hacía era a invitar a una ronda, pero no para ganarse al personal, sino porque le apetecía y punto.
Una vez el guitarrista de Scorpions lo vio en un bar durante una gira. “A mi Bon no me caía bien. Me parecía que se lo tenía muy subido. Entonces se me acercó, y con una total humildad me dijo: Tú eres el guitarrista de Scorpions, verdad?. Inmediatamente nos hicimos amigos”.
Bon era así. No tenía trampa ni cartón. Os recomiendo la “película-concierto” Let There Be Rock. Casi al final aparece Bon después del concierto, volviendo de marcha ya de día y hablando tranquilamente con los fans que andan por allí. O el inicio del concierto en Glasgow, en el que lleva la sudadera del STAFF, honrando a los pipas. Se le ve en su salsa, pero sin ningún atisbo de altanería ni endiosamiento. Completamente llano.
LA MUERTE
La trágica muerte de Bon..: Pues yo aún no lo tengo claro. Bebía mucho, eso es cierto. Bon era ante todo un borracho. En plan lúcido: no era de los que se mamaba y se ponía violento. A las drogas apenas le daba, y muy de cuando en cuando. Muchos colegas de profesión quedaban alucinados de cuánto bebía. La noche del 18 al 19 de febrero de 1980 salió de fiesta por Londres, pero según los testigos, Bon no bebió nada en comparación con lo que era habitual en él. Fue un amigo-conocido, Alistair Kinnear quien le llevó a casa.
Lo que sucedió es que casi llegando, Kinnear se dio cuenta de que Bon estaba inconsciente, así que le dejó en el coche y subió solo. La novia de Bon no estaba en casa, así que Kinnear llamó entonces a Silver Smith, ex-novia de Bon y amiga de Kinnear, que le dijo que le pasaba a menudo (incluso en el estudio le daban esos desvanecimientos etílicos) y que le dejara “dormir la mona”. ¿Pero dónde? Decidió llevarle a su propia casa, pero el estado en el que iba no le animó para cargar con un peso muerto, así que puso a Bon una manta encima y le dejó en el coche durmiendo. Kinnear se acostó en su casa.
Seis horas después a Kinnear le despertó un amigo, y al ver el resacón que le rondaba pidió a este amigo que echara un vistazo a Bon. Poco después dicho amigo volvió y le dijo que no estaba en el coche, así que Kinnear pensó que se habría marchado a casa por su propio pie. Eran las once de la mañana.
A eso de las ocho de la tarde Kinnear despertó, y al bajar a su coche se horrorizó cuando vio a Bon allí tal y como lo había dejado la noche anterior. Había pasado 15 horas en un coche en la calle, con las gélidas temperaturas de Londres en el mes de febrero. Ya era tarde. Y el resto es historia.
En fin, Bon sigue siendo una de las figuras más queridas y respetadas del rock 30 años después de muerto. Todos los fans tenemos especial cariño a los cinco discos del Dragón. El homenaje de la banda a su cantante fallecido “Back In Black” (regreso de luto) es uno de los mejores discos de rock de la historia, y el segundo disco más vendido de todos los tiempos sólo superado por “Thriller” de Michael Jackson. Y la contratación de Brian Johnson se debió en gran parte a que Bon había dicho más de una vez a Malcolm y Angus cuánto le gustaba como cantante. Podría escribir mucho más de Bon, pero os aburriría.
Justo 30 años después, la noche del 18 al 19 de febrero AC/DC estará tocando en Sidney. Esta noche. Se espera un gran recuerdo a Bon.
Por tanto: Una oración y un whisky por el Dragón.
Fuente: chemisanchez.wordpress.com
Bon Scott se cruzó en el camino de AC/DC cuando se convirtió en el chófer de la banda, esto es: conducía la tartana de furgoneta en la que se desplazaban Young&CIA, y por lo visto iba a toda mecha. Y al descubrir la música y la fuerza de AC/DC en directo vio una gran oportunidad para rememorar sus días tocando en una banda. Bon había pertenecido a varias, pero diversos reveses (lo normal en cualquier banda) sumados a un grave accidente de moto que casi le manda al otro barrio, le llevaron a ganarse la vida con estos trabajos menores. Por tanto decidió intentar ganarse un puesto en AC/DC. Como batería.
Bon Scott tenía corazón de batería. Se piensa erróneamente que de niño tocaba la gaita en una banda de gaiteros. Pero en esa banda (Fremantale Scots Pipe Band) lo que él tocaba era el tambor, y de hecho fue el tamborilero principal durante un par de años. En su primer grupo “The Spektors” cantaba, pero en las actuaciones alternaba la voz con su gran pasión. Así que él se ofrecía a los Young como batería. “Pero Bon… Ya tenemos batería.” contestaban.
Fue George Young (el hermanísimo), quien conocía a Scott desde su época de los Easybeats el que vio en él un posible cantante, pues la banda no estaba muy a gusto con Dave Evans (primer cantante de AC/DC). Por otra parte, Bon admiraba a George. La decisión estaba tomada.
“La noche en la que Bon debutó con nosotros se presentó con dos botellas de bourbon, coca y speed. Se lo metió todo en media hora, y cuando creíamos que se iba a caer desplomado se levantó y dijo: Bien, ya estoy listo!” según palabras de Angus. Bon salió entonces al escenario solo. Entre el público había muchos seguidores de Evans que esperaban ver a su ídolo. Bon agarró el micro y dijo “El que haya venido a ver a Dave Evans cantar con AC/DC no va a verlo esta noche porque el grupo lo ha echado porque se ha casado”.
Los Young se llevaron las manos a la cabeza, pero acto seguido Bon tomó el control. Empezó el concierto y la banda inmediatamente sintió una química que no había sentido antes.
AC/DC era pura dinamita, pero se puede decir que fue Bon Scott el que encendió la mecha. Con él, la banda encontró su verdadera personalidad. Empezaron a abandonar la estética glam y aparecieron los vaqueros y los tatuajes. Bon era pura testosterona. Y además era un imán para las mujeres (al principio se asociaba AC/DC con el rollo gay, debido a la deformación “acca dacca”). Existe incluso la leyenda de maridos que pedían al “Dragón Tatuado” que complaciera sexualmente a sus mujeres.
LAS CANCIONES
Bon comenzó a componer unas letras que fueron bautizadas como “poesía de lavabo”. Llevaba siempre consigo una libreta en la que apuntaba ideas, como la frase “A long way to the top if you wanna Rock and Roll”, que sólo era una frase, pero George sabía “picarle” para que sacara una letra entera. En cuanto a la gaita en esta canción: sí, la toca él. Pero porque tenía gran facilidad para aprender. George se lo propuso también creyendo que había tocado la gaita de niño, y Bon la sacó sonido rápido sin apenas haberla tocado en su vida.
She’s Got Balls está inspirada en su ex-mujer (la causa de la ruptura fue el ingreso de su marido en AC/DC) . Según Bon, no es que ella tuviera “un par”, es que el par que tenía era el suyo. En las manos, claro.
She’s Got The Jack (ella tiene purgaciones/gonorrea) se refiere a las continuas afecciones venéreas que contraían todos (salvo Angus, que no ligaba), pero Bon se llevaba la palma hasta el punto de que en la clínica, todos los empleados le conocían hasta el punto de llamarle por su nombre.
Y en cuanto Whole Lotta Rosie ya sabéis: en un concierto en Tasmania por allí andaba aquella pedazo de pelirroja. Según palabras de Bon: “¡Era realmente enorme!¡Cómo iba a decirle que no!”
Cada letra era relativa una vivencia. Y si queréis saber quién era Bon Scott, os sugiero que escuchéis detenidamente Rock&Roll Singer del High Voltage.
EL PERSONAJE
Lo que hizo grande a Bon Scott aparte de su etílica voz fue su personalidad. Era un cantante de Rock, no una estrella. Tenía ese punto gamberro suficiente para salir vestido de colegiala en la televisión australiana cantando Baby Please Don’t Go. Nunca buscaba pelea, pero si era otro el que le provocaba no dudaba en lanzarse. Se perdía en las giras durante el trayecto de una ciudad a otra pero nunca llegó tarde a un concierto. No dudaba en complacer a cualquier mujer (no se limitaba a modelos, como otros). Y sobre todo era un tipo legal y amigo de todo el mundo. Bon entraba en un bar y lo primero que hacía era a invitar a una ronda, pero no para ganarse al personal, sino porque le apetecía y punto.
Una vez el guitarrista de Scorpions lo vio en un bar durante una gira. “A mi Bon no me caía bien. Me parecía que se lo tenía muy subido. Entonces se me acercó, y con una total humildad me dijo: Tú eres el guitarrista de Scorpions, verdad?. Inmediatamente nos hicimos amigos”.
Bon era así. No tenía trampa ni cartón. Os recomiendo la “película-concierto” Let There Be Rock. Casi al final aparece Bon después del concierto, volviendo de marcha ya de día y hablando tranquilamente con los fans que andan por allí. O el inicio del concierto en Glasgow, en el que lleva la sudadera del STAFF, honrando a los pipas. Se le ve en su salsa, pero sin ningún atisbo de altanería ni endiosamiento. Completamente llano.
LA MUERTE
La trágica muerte de Bon..: Pues yo aún no lo tengo claro. Bebía mucho, eso es cierto. Bon era ante todo un borracho. En plan lúcido: no era de los que se mamaba y se ponía violento. A las drogas apenas le daba, y muy de cuando en cuando. Muchos colegas de profesión quedaban alucinados de cuánto bebía. La noche del 18 al 19 de febrero de 1980 salió de fiesta por Londres, pero según los testigos, Bon no bebió nada en comparación con lo que era habitual en él. Fue un amigo-conocido, Alistair Kinnear quien le llevó a casa.
Lo que sucedió es que casi llegando, Kinnear se dio cuenta de que Bon estaba inconsciente, así que le dejó en el coche y subió solo. La novia de Bon no estaba en casa, así que Kinnear llamó entonces a Silver Smith, ex-novia de Bon y amiga de Kinnear, que le dijo que le pasaba a menudo (incluso en el estudio le daban esos desvanecimientos etílicos) y que le dejara “dormir la mona”. ¿Pero dónde? Decidió llevarle a su propia casa, pero el estado en el que iba no le animó para cargar con un peso muerto, así que puso a Bon una manta encima y le dejó en el coche durmiendo. Kinnear se acostó en su casa.
Seis horas después a Kinnear le despertó un amigo, y al ver el resacón que le rondaba pidió a este amigo que echara un vistazo a Bon. Poco después dicho amigo volvió y le dijo que no estaba en el coche, así que Kinnear pensó que se habría marchado a casa por su propio pie. Eran las once de la mañana.
A eso de las ocho de la tarde Kinnear despertó, y al bajar a su coche se horrorizó cuando vio a Bon allí tal y como lo había dejado la noche anterior. Había pasado 15 horas en un coche en la calle, con las gélidas temperaturas de Londres en el mes de febrero. Ya era tarde. Y el resto es historia.
En fin, Bon sigue siendo una de las figuras más queridas y respetadas del rock 30 años después de muerto. Todos los fans tenemos especial cariño a los cinco discos del Dragón. El homenaje de la banda a su cantante fallecido “Back In Black” (regreso de luto) es uno de los mejores discos de rock de la historia, y el segundo disco más vendido de todos los tiempos sólo superado por “Thriller” de Michael Jackson. Y la contratación de Brian Johnson se debió en gran parte a que Bon había dicho más de una vez a Malcolm y Angus cuánto le gustaba como cantante. Podría escribir mucho más de Bon, pero os aburriría.
Justo 30 años después, la noche del 18 al 19 de febrero AC/DC estará tocando en Sidney. Esta noche. Se espera un gran recuerdo a Bon.
Por tanto: Una oración y un whisky por el Dragón.
Fuente: chemisanchez.wordpress.com